viernes, 15 de abril de 2011

a medias


Lo conoció en invierno. Ya ese día compartieron paseo, algo que sería una constante cada vez que se vieran.

Juntos recorrieron kilómetros y kilometros, compartieron rutas siempre con ella como perfecta copiloto. Ese andar los llevó desde Hudson hasta San Martín de los Andes, desde San Pedro a Mar de las Pampas, desde Madero al Nacional Buenos Aires. Disfrutaban de sus viajes, disfrutaban de compartir, hasta silencios.

Ella vestía siempre similar, ropa cómoda, zapatillas.

La primera vez que compartieron intimidades, era casi primavera, no hacía frío. La desnudó de a poco, despacio y suave, como a ella le gustaba, recorriendo detenidamente cada parte que iba descubriendo.

Hasta que llegó a los pies, cubiertos con medias cortas de algodón, ella hizo un gesto de resistencia, él no insistió.

De ahí en más hicieron el amor, ambos desnudos, como es de esperar, pero ella con sus medias puestas.

Una tarde, él no pudo con su curiosidad y le preguntó:

"Mamu... tenés algo en los pies que nunca te sacás las medias?"

Sonrió y se las quitó, dejando al descubierto sus bonitos pies.

A él le brillaron los ojitos rasgados, de ese color miel, en los cuales a ella le encantaba perderse..

"Son hermosos!" le dijo, besándolos..

Miranda sigue durmiendo con medias. Todas las mañanas las encuentra enredadas entre las sábanas, imagina, al mirarlas, que no es ella misma quien, entre sueños, se las quita.


-Morir de nostalgia por algo que no vivirás jamás. "Seda-Alessandro Baricco"


miércoles, 13 de abril de 2011

Daniel

Cuando mi hermana tenía 13 años, "se puso de novia" por primera vez, y con un chico de 18. Papá había fallecido ese año, de lo contrario, creo que el pibe habría huído ante los escopetazos del viejo, que pintaba para guardabosques, pero a quien el destino se lo llevó joven.

Daniel era un buen pibe y cayó bien a todos, especialmente a la hermanita menor, o sea, a mí, que con mis 9 añitos me la pasaba charlando con el flaco, quien, con toda la paciencia del mundo me dedicaba tiempo, y hasta me llegó a regalar un librito de sus favoritos de niño, el cual aún conservo y de vez en cuando recorro, especialmente para leer los comentarios, algunos de Daniel de su infancia, otros míos, y es inevitable que una sonrisa se me pinte en el rostro.



Dani venía cada tarde, después de que mi hermana regresaba del colegio. Yo lo esperaba con casi igual ansiedad que ella, y lo primero que hacía era abalanzarme sobre lo que él traía debajo del brazo: discos.

Así fue que, a temprana edad, mientras mis amigas escuchaban canciones infantiles, yo disfrutaba del rock: Purple, Zeppelin, Neil Young y hasta llegué a cantar "Sun Arise" acompañando a Alice Cooper.

Entonces, con mis 9 años, ahorrando de a poquito fui en busca de mi primer disco de vinilo, ese que me encantaba.



Discazo, del cual me encantan todos los temas, pero éste en especial:






Y ese fue el comienzo...

Al tiempo mi hermana y Daniel dejaron de verse, no supimos más de él, pero siempre está en mis recuerdos, como uno de los culpables de que me guste tanto la música.

domingo, 10 de abril de 2011

Metropolis





























Este año, en el BAFICI se puede ver la famosa copia restaurada de Metrópolis de Fritz Lang en su versión casi original, luego de lo que aconteciera hace un par de años y que más abajo cuento.

Hubo muchas idas y vueltas alrededor de su estreno, ni qué hablar respecto a su restauración. De esta historia puede leerse en el último libro de Fernando Peña y en el documental Metrópolis refundada, donde Peña, Paula Félix y otros que fueron parte de este acontecimiento tan importante, cuentan la historia. Cabe destacar que lo que copio abajo es un post mío en otro blog que escribí en julio del 2008, cuando recién se habían encontrado las latas con minutos adicionales en el Museo del Cine.

Agrego un par de cosas:

Originalmente, se había pensado estrenar la copia en el Colón, iba a venir la gente del Museo de Berlín, que colaboró en la restauración, y la Orquesta Sinfónica de la Radio de Berlín interpretaría la partitura original compuesta por Gottfried Huppertz, recreando el estreno mundial de la película el 10 de enero de 1927 en Berlín. Pero al parecer, el Gobierno de la ciudad no quiso acceder a esto.
Después se pensó en hacerlo en La Plata, con similar entorno, no sé que pasó pero tampoco pudo ser.

Finalmente se puede ver, en el contexto del BAFICI, el 12 de Abril a las 20horas, en el Complejo Cultural Cine Teatro 25 de Mayo (Av. Triunvirato 4444) con música en vivo de Marcelo Katz Trio.

Aquí va el post de hace un tiempo atrás:

Hace unos días Argentina fue noticia en el mundo del cine. Algunas latas conteniendo minutos de la original Metrópolis fueron encontrados en el Museo del Cine.


Quien las encontró, por que sabía desde hace tiempo su existencia fue Fernando Martín Peña, historiador de cine, amigo de mi hermano, por eso hay algunos detalles al respecto que conozco y que no han trascendido. La película, una fábula marxista de ciencia ficción sobre una sociedad de trabajadores sin rostro convertidos en máquinas en aras de una civilización superior, había sido cortada y reducida en su versión estadounidense.

Esa versión reducida es la única que se conservaba hasta el momento en todo el mundo, pues la segunda Guerra Mundial y la fragilidad del material de los rollos -de nitrato, material que autocombustiona- hicieron que todas las copias de la versión original, estrenada por Lang en 1927, se perdieran.

Fernando sabía, por el último gran restaurador de cine que tuvimos en la argentina (Octavio Fabiano), que este material existía en el Museo del Cine. Le hizo el comentario al ex-director pero el tipo no le dió bola.

Fer tuvo la suerte que una amiga, Paula Félix fuera nombrada como directora del Museo del cine, y no dudó en ir a hablar con ella. Peña también sabía que en los años 20 la distribuidora que trajo Metrópolis a Argentina y a otros países latinoamericanos era Terra, así que acudió a sus archivos y comprobó que la cinta que había en Buenos Aires había sido importada directamente desde Alemania y no desde Estados Unidos.

El resultado es que se encontraron varios minutos de cine que se creían irrecuperables.. lo mas triste es que este material ha estado ahí, durmiendo en cajones en el museo del cine por años.

Mi hermano me comentó que hablando con Fer (son amigos de mucho tiempo), Fer le dijo que con las latas encontró material de cine mudo argentino inédito.. y que tiene que revisar alguna otra lata de todo el material encontrado ya que cree que puede encontrar algunos minutos mas de Metrópolis.

Increíble.. no? material tan importante para la historia del cine mundial, permanece tirado en cajones por años, sin que nadie le de valor.

El que tenga un tiempito, vaya a ver esta nota al fallecido Octavio Fabiano aquí