Viernes por la noche, Plaza Serrano, sentaditos en las mesas de afuera de un bolichito, tomando una cerveza a pesar del fresquete. Él, un gran amigo, me dice: “estoy aprendiendo a separarme sin culpa, pero más allá de eso, tengo un poco de miedo, nunca viví solo”. Una vez que aceptamos a la soledad como una amiga, recién podemos aprender a relacionarnos con los demás, es así de simple, pienso. Le sonrío, le tomo la mano y se la apreto fuerte.
me encanta tu blog! es una pasada!de donde sacas esas entradas, de libros y eso o son inventadas x ti ?=)
ResponderEliminarGracias Irene, y sí, son inventadas por mí.
ResponderEliminarcoincido plenamente con vos sobre la soledad.
ResponderEliminarbesotes
El unico problema es que nunca nos dejan solos....!!!!
ResponderEliminarJusto ahora suena el tf---3.40pm
Coc, será? Yo estoy un poco cansada de estarlo... snif.
ResponderEliminar